Ministerio de Justicia y Derechos Humanos
La Secretaría de Derechos Humanos señalizó como sitio de memoria la Base Militar en Ingenio “La Fronterita”
En este lugar fueron detenidos ilegalmente trabajadores de los ingenios azucareros y otras personas vinculadas con la militancia sindical y política en la región durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983) y antes de esta.
Publicado el viernes 22 de septiembre de 2023 – Ministerio de Justicia y Derechos Humanos / Secretaría de Derechos Humanos / Sitios y Espacios de Memoria
La Secretaría de Derechos Humanos, a través de la Dirección Nacional de Sitios y Espacios de Memoria, junto a la Secretaría de Derechos Humanos y Justicia de la provincia de Tucumán, señalizó la Base Militar en el Ingenio “La Fronterita” como sitio de memoria del terrorismo de Estado.
De la jornada participaron la directora nacional de Sitios y Espacios de Memoria, Lorena Battistiol y la directora nacional de Gestión de Fondos Documentales del Archivo Nacional de la Memoria, Andrea Copani; junto con los ex presos Ricardo Mercado, Enrique Amaya y Mario Correa. También participaron familiares de víctimas, integrantes del Espacio para la Memoria y la Promoción de los Derechos Humanos ex CCDTyE “La Escuelita de Famaillá” y organismos de derechos humanos.
Desde febrero de 1975, en el marco del Operativo Independencia, y durante la última dictadura cívico-militar (1976-1983), en instalaciones cedidas por el ingenio “La Fronterita”, se estableció una base militar. Allí fueron detenidos ilegalmente trabajadores de los ingenios azucareros y otras personas vinculadas con la militancia sindical y política en la región. Las víctimas permanecían secuestradas y eran sometidas a torturas en distintos sectores del ingenio, como los conventillos, el tambo y la laguna. Luego eran trasladadas a otros centros clandestinos de detención, a penales provinciales o federales, liberadas o desaparecidas.
La Justicia federal condenó la participación de las Fuerzas Armadas por los crímenes de lesa humanidad cometidos en este centro clandestino y actualmente se encuentra investigando la responsabilidad cívico-empresarial. “Les pido que sigamos la lucha para que esto se haga justicia y que no se borre. Los dueños de este ingenio La Fronterita prestaron el establecimiento y fueron promotores para que torturen la gente, para que nos torturen a nosotros”, afirmó Enrique Amaya.
La señalización de los ex centros clandestinos de detención y de otros lugares donde sucedieron hechos emblemáticos durante el terrorismo de Estado, a través de la Ley Nacional N° 26.691 y la Ley Provincial N° 8.514, los hace visibles y expresa en el espacio público el compromiso del Estado democrático de dar a conocer y condenar los delitos allí cometidos, acompaña el juzgamiento de sus responsables y efectiviza el reconocimiento hacia las víctimas y sus familiares.
