CONICET
La RACME fue invitada a participar del plenario de discusión del marco regulatorio del Cannabis Medicinal del Uso Industrial y Medicinal
Silvi Kochen fue al Senado en representación de la Red.
Publicado el 12 de julio de 2021 – CONICET
En nombre de la Red de Cannabis Medicinal (RACME) del CONICET que coordina, la investigadora del CONICET Silvia Kochen fue invitada al plenario conjunto de las comisiones de Agricultura, Ganadería y Pesca, de Presupuesto y Hacienda y de Seguridad Interior y Narcotráfico del Senado de la Nación. El objetivo era debatir el proyecto de ley que que establece el marco regulatorio de la cadena de producción, industrialización y comercialización de la planta de cannabis, sus semillas y sus productos derivados para uso industrial y/o medicinal.
Durante su alocución, que se realizó a través de una videoconferencia, Kochen comentó la historia de la RACME, contextualizó en torno a las limitaciones de la Ley 27350 y subrayó la necesidad de que el proyecto que se propone desde el Ejecutivo se transforme en ley. “Hoy ya millones de habitantes en nuestro país que utilizan al cannabis como producto medicinal y no cuentan con las garantía suficientes”, indicó en el marco de la reunión plenaria, que fue presidida por el senador por San Luis, Adolfo Rodríguez Saá (FdT) en su condición de titular de la comisión de Agricultura.
“Hoy tenemos evidencia científica sobre la eficacia del tratamiento de cannabis en epliepsia refractaria y dolor crónico”, explicó Kochen, agregando que “no existe dosis letal en su uso, ni que provoque adicción”. Por otro lado, dijo, “hay en marcha en el mundo numerosos ensayos clínicos con cannabis en diferentes patologías, y si esta ley se aprobara nosotros podríamos iniciar muchos otros proyectos”. Kochen indicó que todavía hay muchas cosas que aun no se saben del cannabis medicinal, y que por eso “es necesaria la investigación básica y experimental en torno al tema”. Como también: “Es necesario hacer investigaciones clínicas, la idea es que esto se multiplique a lo largo y ancho del país para seguir avanzando en el conocimiento sobre la eficacia, la presencia posible de efectos adversos, la dosis adecuada, entre otros”.
En otro tramo de su presentación en el plenario del Senado, indicó que es necesario que el CONICET, a través de la RACME, participe del Directorio de la Agencia que se creará a partir de la ley. Se refería a que la iniciativa del Poder Ejecutivo Nacional contempla la creación de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME), una agencia reguladora que oficiará como órgano rector y articulador de la cadena productiva del cannabis y tendrá a su cargo las múltiples instancias de regulación involucradas. Dicha agencia orbitará en el ámbito del Ministerio de Desarrollo Productivo y tendrá jurisdicción en todo el territorio nacional. “Es necesario que la ley tenga una base de investigación, que se cree un área en ese sentido y que desde la misma Agencia se otorgue un presupuesto para llevar adelante dichas investigaciones”, enfatizó Kochen.
Por último, la científica indicó la necesidad de que se establezca una categoría de uso medicinal que no esté limitado al grado farmacéutico. “Esta nueva categoría, que ya está introducido en Israel, Estados Unidos, Canadá”, abre las puertas para el uso medicinal, y es se puede realizar”, señaló la coordinadora de la RACME. “Confiamos muchísimo que con este proyecto se resuelva este aspecto, es esencial para el uso del cannabis medicinal en seres humanos. Esta ley tiene involucrar a todos los sectores que venimos trabajando en cannabis medicinal para garantizar desde el Estado productos de calidad, con buenas prácticas de cultivo y de manufactura, para que además los costos de estos medicamentos sean accesibles”, concluyó Kochen en el plenario, del que también participaron otros doce expositores invitados.
En el mensaje del Poder Ejecutivo en torno a la ley en discusión, se destaca que “durante los últimos años, la industria del cannabis legal ha generado gran interés a nivel mundial. El avance gradual hacia la legalización del uso medicinal, terapéutico y paliativo del cannabis, como así también la reconsideración del potencial del cáñamo industrial (una variedad específica de cannabis con nulo o muy bajo contenido del cannabinoide psicoactivo THC y aplicaciones múltiples en la industria y la construcción) ha dado lugar al surgimiento de una industria naciente y muy dinámica que involucra iniciativas del sector público, privado y de organizaciones de la sociedad civil”.
También se resalta en el texto que “el primer objetivo del presente Proyecto de Ley consiste en establecer un marco legal que autorice, -a través de un fuerte esquema regulatorio-, las etapas de siembra, cultivo, cosecha, producción, almacenamiento, transporte, comercialización, importación, exportación y posesión de semillas de cannabis, de la planta de cannabis, y de sus derivados, con fines de aplicación medicinal, terapéutica, paliativa o de investigación científica. Se busca impulsar una Ley que posibilite y fomente los proyectos de inversión pública, privada o mixta en los distintos segmentos de la cadena sectorial del cannabis medicinal.
